Incomprensión y locura me abaten.
Soy cenizas, promesas de euforia,
un animal abatido, fusiladme.
Soy las vueltas de una noria,
aquellas manos que sabían calmarme,
tu decepción más aberrante.
Soy mis mañanas frías, tus noches,
el juguete roto del que te cansaste.
Soy el intento de olvido, punzante.
Soy la caída abierta al hoyo,
la voz de un gilipollas, secante.
Soy tu silencio, mi camino torcido.
Soy un golpe torpe contra todo,
un mes estrafalario y errante.
Soy las siestas duraderas,
los besos a ciegas al despertarse,
un perro que fue al campo
y no volvieron a buscarle.
Soy mis defectos del tiempo,
mi pereza, mi alejamiento,
soy, una mierda gigante.