Manantiales sin fin

Bosques de zarzas, afilado espino

atravieso mientras busco rastros perdidos

de manantiales orgullosos y hundidos,

agua fresca que me susurre que vivo.

 

Nado en sus aguas de duro olvido,

rémoras en mi espalda beben a gritos

los recuerdos en mi seca piel hendidos

succionan suavemente tu dulce hechizo.

 

De estas aguas profundas no se salir,

en el fondo, se que tus ojos no van a abrir,

me vuelvo loco e intento volver a subir

a coger un sorbo de aire y volver allí.

 

Me ahogo y me pregunto si de camino

volveré a notar tu compás con el mío,

joder, aquí abajo hace demasiado frío…

¿cómo volveré a sentir sin tu abrigo?

 

De estas aguas profundas no se salir,

en el fondo, se que tus ojos no van a abrir,

me vuelvo loco e intento volver a subir

a coger un sorbo de aire y volver allí.

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