El iluso

Aunque se que desaparecí

de todos tus pensamientos,

me rebozo en cada resto

que susurra

tu regreso.

 

Aunque problemente

nunca exista, me alimento

de este imperecedero brebaje

que susurra las sonrisas

que me traes desde tu primera vista.

 

Donde pude esconder

mis miedos con tu brisa,

donde quise huir

hasta donde me llevaras,

con esos diamantes de miel

marcando cada paso.

 

¿Dónde perder la esperanza,

de sumirme entre tus brazos?

De sentirme en tu cuello roncando

mientras te rodeo con mis manos,

de perder toda la tarde

viendo películas de argumentos malos,

de verte sin maquillaje

y ver desnudo el arte.

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